Alfredo Abundis, el primer novio que Irina Baeva tuvo en México, asistió recientemente a una función de "Aventurera" para ver la actuación de su ex pareja en el papel de Elena Tejero. Según Abundis, la actriz rusa realiza una interpretación destacada, notando algunas similitudes entre la vida del personaje y la de Baeva.
En una entrevista exclusiva con el canal "En Shock", Abundis, un ingeniero electrónico, compartió recuerdos de su relación universitaria con Baeva, la cual duró más de cuatro años hasta que la actriz comenzó a destacar en el Centro de Educación Artística (CEA) de Televisa. Aunque desmintió haberla asistido económicamente para su viaje a México, describió a Irina como una mujer "cruel" y "despiadada", comentarios que generaron controversia.
Durante su visita al Salón Ángeles, donde se presentaba la obra, Abundis mostró nerviosismo al reencontrarse con Baeva después de más de una década. Aunque planeaba entregarle flores al finalizar la función, prefirió mantenerse anónimo y disfrutar del musical producido por Juan Osorio.
A pesar de estar sentado en la cuarta fila y de tener a la actriz cerca en dos escenas, no hubo contacto visual entre ellos. Al término de la obra, Abundis elogió la actuación de Baeva, aunque señaló que las coreografías no son su fuerte. "Excelente, muy buena obra, creo que la actuación y el desempeño de ella fueron bastante profesionales, entretenida, amena, familiar, le quedó el papel, (del baile) le falta algo más de movimiento, algo más como sabor latino", comentó.
Abundis también mencionó que la historia de Elena Tejero le recordó aspectos de la vida de Irina, exceptuando el tema de explotación sexual. "Se parece un poco su historia, pudo no haberla actuado y ser ella misma, en cierto sentido, saltándose toda la parte de trata de blancas y proxenetas", aclaró.
Finalmente, el ingeniero expresó su gratitud por la oportunidad de ver a su ex pareja nuevamente, un deseo que había mantenido durante años. "Siempre quise volver a verla y se cumplió parcialmente, me daría curiosidad saber cómo reaccionaría si la viera, (hablar con ella) sería genial, grandioso, la saludaría casual, saber cómo le ha ido, cómo nos ha ido en la vida y compartir teléfonos nada más", concluyó.
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