HUASTECA GLOBAL NEWS- 09 OCTUBRE 2024
Un atentado en las cercanías del aeropuerto internacional de Karachi, Pakistán, ha resultado en la muerte de al menos dos ciudadanos chinos y ha dejado varios heridos. El ataque ocurrió la noche del 6 de octubre y estaba dirigido contra un convoy de trabajadores de la empresa Port Qasim Limited, que se encontraba en el país en el marco del Corredor Económico China-Pakistán (CPEC).
Según la embajada china en Pakistán, el ataque se produjo alrededor de las 11:00 p.m., hora local, cuando un convoy que transportaba a los trabajadores fue atacado cerca del aeropuerto internacional de Jinnah. El grupo armado Ejército de Liberación de Baluchistán (BLA) reivindicó el ataque en un comunicado posterior. Este grupo ha sido responsable de múltiples agresiones contra ingenieros chinos en los últimos años, coincidiendo con la creciente inversión de Pekín en Pakistán.
La embajada china en Islamabad ha lanzado un "plan de emergencia inmediato" tras el ataque y ha instado a las autoridades paquistaníes a realizar una investigación exhaustiva y a tomar medidas para garantizar la seguridad de sus ciudadanos y proyectos en el país. En su declaración, la embajada subrayó la necesidad de proteger a los trabajadores y las instalaciones chinas, dado el contexto de inestabilidad y riesgo en ciertas regiones de Pakistán.
El atentado ha suscitado preocupación entre la comunidad china en Pakistán, ya que ha habido un aumento en los ataques dirigidos a ingenieros y trabajadores chinos. En marzo, un ataque suicida en el distrito de Shangla dejó seis muertos, incluidos cinco ingenieros chinos. Este patrón de violencia ha llevado a la embajada a instar a sus ciudadanos a estar atentos a la situación de seguridad.
El Corredor Económico China-Pakistán, un proyecto que implica una inversión de 60 mil millones de dólares, busca desarrollar diversas infraestructuras en Pakistán, pero también ha convertido a los trabajadores chinos en objetivos de grupos insurgentes que se oponen a la influencia de Pekín en la región.
Mientras las autoridades paquistaníes evalúan la situación, la embajada china reitera su compromiso de proteger a sus ciudadanos y sus inversiones en el país, enfrentando un entorno cada vez más peligroso.
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