El Congreso de Veracruz aprobó este jueves la reforma constitucional que transfiere la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), sumándose a los estados que ya han respaldado la iniciativa. Con 35 votos a favor y 9 en contra, la reforma impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador avanza en su camino hacia la implementación.
La aprobación en Veracruz se enmarca en un contexto de división política, con la mayoría de Morena en el Congreso estatal logrando el respaldo necesario, a pesar de la oposición de algunos legisladores. Entre los opositores destacaron Maribel Ramírez Topete, del PAN, y Marlon Ramírez Marín, del PRI, quienes argumentaron en contra del traspaso, alegando que la seguridad pública debe ser gestionada por instituciones civiles enfocadas en la protección de los derechos humanos.
Ramírez Topete, quien recientemente se unió al PAN desde Movimiento Ciudadano, propuso una transición de la Guardia Nacional hacia un modelo de policía civil, supervisado y con programas de certificación. Por su parte, Ramírez Marín criticó al presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, por su aparente cambio de postura respecto a la militarización del país, mostrando un audio en el que Noroña rechazaba el uso de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
La reforma, propuesta el 5 de febrero por López Obrador, contempla que la Guardia Nacional se integre a la Sedena y asuma algunas funciones relacionadas con la investigación de delitos. Este movimiento ha sido respaldado por varios congresos estatales, incluyendo los de Zacatecas, Baja California, Yucatán, Campeche, Durango, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Oaxaca, Tabasco y Tlaxcala.
Con la aprobación de Veracruz, el número de estados que han respaldado la reforma asciende a 11, acercándose a los 17 necesarios para su ratificación constitucional.
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