El cuerpo de Yovanny, un joven migrante guatemalteco, ha permanecido en una morgue en la Ciudad de México durante 13 años. Su familia, que reside en Guatemala, está pidiendo que se le devuelvan sus restos.
En 2011, Yovanny, con 17 años, intentó migrar a Estados Unidos para apoyar a su familia. Durante su travesía, fue secuestrado, torturado y asesinado por criminales en Tamaulipas, y su cuerpo fue abandonado en una fosa común. Las autoridades mexicanas recuperaron un cuerpo y lo enviaron a su familia, pero resultó no ser él.
Rosmery Yax, abogada de la familia, explicó que este error ha vulnerado los derechos de la familia y ha impedido la plena identificación de la víctima. La familia pide no solo la restitución del cuerpo de Yovanny, sino también que el cuerpo equivocado sea retirado de Guatemala para que otra familia pueda encontrar paz.
Yovanny, un joven indígena Quiché, dejó su hogar en busca de una vida mejor, pero su viaje terminó trágicamente en Tamaulipas. A pesar de que las autoridades encontraron su cuerpo en una fosa común junto a otros 195 cuerpos, su identificación correcta no se realizó hasta años después.
La Fundación para la Justicia de México y la Comisión Forense han trabajado en la identificación correcta de los restos de migrantes desaparecidos. En el caso de Yovanny, se descubrió en 2015 que el cuerpo entregado a su familia no coincidía con sus familiares genéticamente.
A pesar de los esfuerzos para corregir este error, hasta la fecha no se ha logrado repatriar el cuerpo de Yovanny. La Fiscalía General de la República de México ha solicitado asistencia jurídica internacional a Guatemala, pero no ha recibido respuesta. La familia espera que el presidente guatemalteco Bernardo Arévalo intervenga para resolver esta situación y traer paz a su hogar.
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