HUASTECA GLOBAL NEWS- 15 OCTUBRE 2024
El Premio Nobel de Economía 2024 ha sido otorgado a Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson, tres investigadores que han demostrado la importancia fundamental de las instituciones sociales en el desarrollo económico de un país. Sus estudios han cambiado la forma en que se comprenden las diferencias en prosperidad entre naciones, al identificar a las instituciones como el factor clave que determina si una sociedad progresa o permanece estancada.
El caso emblemático de Nogales, una ciudad fronteriza dividida en dos por una valla que separa México y Estados Unidos, sirvió como punto de partida en sus investigaciones. A pesar de compartir la misma geografía y una historia cultural similar, las condiciones de vida de los habitantes al norte de la valla son notablemente superiores a las de sus vecinos al sur. La diferencia no radica en la cultura o el entorno natural, sino en las instituciones políticas y económicas que rigen en cada lado de la frontera. Los habitantes del lado estadounidense disfrutan de mayores oportunidades educativas, laborales y de derechos políticos, mientras que los del lado mexicano enfrentan limitaciones institucionales que frenan su desarrollo.
Los trabajos de los galardonados no solo muestran la relación entre instituciones y prosperidad, sino que han revelado cómo estas estructuras sociales pueden ser difíciles de cambiar debido a su naturaleza persistente. Han utilizado un enfoque histórico para explicar cómo las instituciones establecidas durante la colonización europea, ya sea como sistemas inclusivos o extractivos, han determinado el destino económico de los países hasta hoy. Los territorios donde los colonos enfrentaron altas tasas de mortalidad y establecieron instituciones para su beneficio exclusivo son ahora más pobres, mientras que aquellos con sistemas inclusivos presentan economías más prósperas.
El modelo teórico desarrollado por Acemoglu, Johnson y Robinson consta de tres componentes principales: el conflicto sobre la distribución de recursos, la capacidad de las masas para desafiar a las élites, y el compromiso de la élite para compartir el poder. Este marco ha permitido explicar procesos históricos de democratización y el cambio institucional en diversas partes del mundo.
El premio de este año incluye un reconocimiento de 11 millones de coronas suecas, y será entregado el próximo 10 de diciembre en una ceremonia en Estocolmo. Los investigadores continúan la tradición de premiar contribuciones significativas en la economía, sucediendo a Claudia Goldin, quien fue reconocida en 2023 por su trabajo sobre la participación femenina en el mercado laboral.
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