El Gobierno de Javier Milei anunció que ha iniciado conversaciones con empresas privadas latinoamericanas para que se hagan cargo de las rutas que Aerolíneas Argentinas no puede cubrir debido a las huelgas convocadas por los gremios aeronáuticos. Estas medidas llegan tras los paros encabezados por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y otros sindicatos, que afectaron a cerca de 40,000 pasajeros y generaron pérdidas de más de 2.5 millones de dólares para la aerolínea estatal.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, declaró que el Gobierno está decidido a "sepultar los piquetes gremiales" y tomar medidas drásticas contra las huelgas que están complicando la vida de miles de argentinos. La medida consiste en que otras aerolíneas privadas latinoamericanas tomen las rutas que Aerolíneas Argentinas no cubra debido a las huelgas.
El conflicto con los gremios, que reclaman mejoras salariales debido a la inflación que afecta a sus ingresos, ha generado tensiones, y el Ministerio de Seguridad ha denunciado al líder sindical Pablo Biró por presuntas amenazas y extorsión. Mientras tanto, se esperan más asambleas y huelgas, lo que podría agravar la situación.
Aunque Milei tenía la intención inicial de privatizar Aerolíneas Argentinas, la compañía quedó fuera del listado de empresas públicas a privatizar tras negociaciones con la oposición en la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos.
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