HUASTECA GLOBAL NEWS- 28 OCTUBRE 2024
Tres periodistas fallecieron en un bombardeo supuestamente realizado por el Ejército israelí en la madrugada del viernes en la ciudad de Hasbaya, al sur del Líbano. El ataque, que se produjo alrededor de las 4 a.m., tuvo como objetivo una residencia donde se alojaban profesionales de medios de comunicación. Los fallecidos son dos camarógrafos y un técnico que cubrían la ofensiva israelí en la región. Según la cadena Al Jazeera y la Agencia Nacional de Noticias de Líbano, el bombardeo se llevó a cabo sin previo aviso y en una zona que no contaba con órdenes de evacuación, lo que ha generado preocupación y condena por la seguridad de los periodistas en zonas de conflicto.
Este trágico suceso se suma a un ataque previo contra las instalaciones de la cadena de televisión Al Mayadeen en Beirut, el cual dejó un muerto y cinco heridos. La agresión ocurrió en medio de las crecientes hostilidades entre el Ejército israelí y el grupo chií Hezbolá, que comenzaron el 8 de octubre de 2023. Desde entonces, el conflicto ha escalado de manera significativa, con bombardeos, ataques con cohetes y operaciones militares que han cobrado la vida de más de 2,500 libaneses, entre ellos un alto número de civiles.
Las tensiones en la región se intensificaron a finales de septiembre, cuando Israel incrementó sus bombardeos y empezó a atacar a altos dirigentes de Hezbolá. El 1 de octubre, se lanzó una invasión terrestre en el sur del Líbano, marcando un punto de inflexión en la guerra. Las muertes del viernes reflejan el creciente peligro al que se enfrentan los periodistas en la cobertura de conflictos armados, donde la línea entre combatientes y civiles se vuelve cada vez más difusa.
Al Jazeera, cuyo corresponsal en Hasbaya declaró que trabajaba con los fallecidos "casi cada día", ha manifestado su indignación por la falta de advertencia previa en un área sin evacuación obligatoria. La gravedad del incidente ha generado críticas hacia el Ejército israelí, que no ha reconocido su participación en el bombardeo. La situación plantea una vez más la necesidad de proteger la libertad de prensa y garantizar la seguridad de los periodistas en zonas de conflicto, una cuestión que se vuelve especialmente urgente en la actual escalada en Medio Oriente.
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