Huasteca Global News - 18 de febrero de 2024
En respuesta al reconocimiento del estrés laboral como enfermedad profesional en la Ley Federal del Trabajo (LFT), las empresas en 2024 están implementando medidas proactivas para combatir el burnout y fomentar un entorno de trabajo saludable. Estas estrategias no solo buscan prevenir incapacidades y reducir las primas de riesgo ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sino también mejorar la productividad y el bienestar de los empleados.
Según el informe "Cambios laborales en México, a tres años de la pandemia" de OCC Mundial, el estrés laboral ha afectado a aproximadamente el 70% de los trabajadores, un problema exacerbado por la pandemia de Covid-19. Factores como liderazgo deficiente, organización ineficaz, largas jornadas laborales y sobrecarga de trabajo han sido identificados como principales causantes del burnout.
Para contrarrestar estos desafíos, expertos en bienestar laboral como la plataforma Betterfly sugieren diversas acciones:
Definición y Respeto de Horarios: Es crucial establecer horarios laborales claros para prevenir la extensión de jornadas y la sobrecarga de tareas, manteniendo así un equilibrio entre la vida laboral y personal.
Promoción del Descanso: Las empresas deben fomentar pausas regulares durante la jornada laboral para permitir a los empleados desconectar y recargar energías.
Incentivo de Actividades Recreativas: Organizar actividades fuera del entorno laboral puede fortalecer la cohesión del equipo y permitir a los empleados despejar su mente del trabajo.
Reconocimiento de Logros: Una cultura de retroalimentación positiva que celebre los éxitos y reconozca los esfuerzos contribuye a un ambiente de trabajo motivador y respetuoso.
Evaluación de Cargas de Trabajo: Las empresas deben revisar periódicamente las asignaciones de tareas para asegurarse de que sean justas y manejables, evitando la sobrecarga en los empleados.
La actualización de la LFT, que entró en vigor en diciembre de 2023, subraya la importancia de abordar el burnout y otros trastornos mentales como condiciones laborales, enfatizando la necesidad de un manejo adecuado del estrés en el lugar de trabajo.
La adopción de estas medidas por parte de las empresas representa un paso significativo hacia la creación de entornos laborales más saludables y productivos, alineándose con las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la NOM-035 sobre factores de riesgo psicosociales, que destacan la prevención como clave para el bienestar de los trabajadores.
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