HUASTECA GLOBAL NEWS- 07 NOVIEMBRE 2024
La elección de Donald Trump para un segundo mandato ha llevado a muchas mujeres a preguntarse cuándo —o si— Estados Unidos verá a su primera presidenta. Kamala Harris, quien aspiraba a romper el llamado "techo de cristal" al convertirse en la primera mujer presidenta, se enfrentó a una derrota significativa, que ha dejado sentimientos mixtos entre sus seguidores y simpatizantes.
A pesar de que Harris contó con el apoyo de un 53% de las votantes femeninas, según AP VoteCast, su respaldo entre las mujeres fue ligeramente menor al de Joe Biden en 2020. Este hecho ha llevado a muchas a reflexionar sobre el papel que juega el género en la política y sobre el compromiso de la sociedad estadounidense con la igualdad de género en el poder. Denise Martin, una votante de Georgia, expresó su frustración al señalar que "la mayoría de los estadounidenses aún no están listos para una mujer en el Despacho Oval".
Algunas mujeres, como Katherine Mickelson, de 20 años, sostuvieron que su apoyo a Trump no se basó en cuestiones de género, sino en temas como la economía y los valores familiares. Para otras, el potencial de hacer historia con una presidenta fue un factor relevante, aunque no determinante, como lo demuestra el hecho de que sólo una cuarta parte de las votantes consideraron el género de Harris como un aspecto importante.
La situación ha generado debates intensos dentro de los hogares y comunidades, como en el caso de Dee Bertino, de Nueva Jersey, cuyo apoyo a Harris contrastó con el respaldo de su esposo a Trump. A pesar de esta división, Bertino considera que los derechos de las mujeres y el respeto por la democracia son prioridades que deberían estar por encima de las diferencias políticas.
Por su parte, Harris mantuvo un tono de optimismo en su campaña, a pesar de los desafíos y los ataques, algunos de ellos con tintes sexistas, lanzados por Trump y su equipo. No obstante, su mensaje de unidad y esperanza no fue suficiente para convencer a una mayoría de votantes.
La derrota de Harris también trae consigo interrogantes sobre el futuro del país en cuanto a políticas de igualdad de género y derechos reproductivos, temas que han sido objeto de intenso debate en los últimos años. Según Elizabeth Herbert, una votante de Trump, el país podría tener una presidenta en el futuro, pero “Harris no era la candidata adecuada”.
Mientras algunas de sus simpatizantes se enfrentan a sentimientos de decepción, otras intentan ver con esperanza lo que está por venir. "El mundo cambiará, pero debemos encontrar nuestro camino en él. No podemos dejar que esto nos derrote", concluyó Martin, quien aún mantiene la esperanza de ver un avance significativo hacia la inclusión de mujeres en los más altos cargos de poder en el futuro.
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